miércoles, 6 de febrero de 2013

SOBRES LLENOS, ESPACIOS VACÍOS


Es una evidencia: A medida que en política los sobres se van incrementando, el espacio que separa a esta de la ciudadanía, se hace también más grande. Y es una pena porque los sobres son fáciles de llenar, pero los espacios políticos son algo más complicado de ocupar.
El lamentable espectáculo que está dando la clase política española en estos últimos días ya lo estamos pagando caro. Es tal la desfachatez e impunidad con la que ha venido actuando la derecha de nuestro país, que hasta resulta bochornoso imaginarse a esas personas trincando. Todo lo anterior, claro está; supuestamente. Pero ¿y si luego resulta que es ciertamente? Pues se tendrán que ir. Todos. Todas.
Pero en estos temas de corrupción hay que profundizar. En la calle se habla y se hacen analogías que, a veces, conforman un runrún ensordecedor. Y no hay más sordo que el que no quiere oír.
La gente está harta de sobres con sobresueldos, pero también de otro tipo de sobres. Porque se puede llegar a ser tan deshonesto repartiendo sobres con dinero, como haciéndolos llegar con nombres de los que hay que promocionar en la administración, o marginar, o prejubilar, o nombrar a dedo para un puesto de trabajo que nunca se ganó -ni por méritos, ni por habilidades personales. O con la relación de nombres que hay que poner en las listas -aunque ni vivan, ni hayan hecho ni el huevo por la ciudad o pueblo por el que se van a presentar. Esos sobres, dicen, también son inmorales. Y yo estoy de acuerdo.
La gente de la calle también dice que hay un espacio político por llenar. Un lugar que únicamente podrá se colmado con personas que estén dispuestas a figurar en unas listas abiertas a todos los ciudadanos y que vengan precedidas de unos valores sólidos. Políticos a los que no se les pueda achacar que han llegado al servicio público sin actividad laboral anterior a la que volver, de forma sumisa, sin experiencia en la política ciudadana de base, para enriquecerse, para figurar, o después de una fantástica carrera de trepa dentro de su partido.
La clase obrera está buscando esa alternativa para depositar sus esperanzas en gente que tengan el coraje de rechazar todos aquellos privilegios que ha acumulado la clase política. Que descubra y denuncie a los golfos que se infiltren en sus filas. Que sepa, realmente, cuánto cuesta llevar una casa adelante con un sueldo mínimo. Que pueda mirar a los ojos a la ciudadanía sin sentir vergüenza por sus actos. Que no acepte poder disfrutar de un menú de reyes, a mesa y mantel, a menor costo que el que tiene que afrontar una familia  para prepararle una fiambrera a su pequeño para el almuerzo. Un frío almuerzo en un aula fría de un colegio público mal dotado.
La ciudadanía está demandando una nueva clase política que venga a ocupar ese espacio huérfano. Los partidos políticos -si quieren seguir subsistiendo y ocupar algo de ese espacio disponible-, tienen que acometer una profunda renovación de personas, ideas, proyectos y procedimientos. Como mínimo.
Sólo así llegaremos a ser una sociedad en la que la libertad, la democracia, la educación, la cultura, el trabajo, la decencia, el compromiso, la solidaridad y, cómo no; la honradez, sean las señas de identidad y no tengamos que sentir vergüenza de nuestros dirigentes. No dejemos que ese espacio que ahora tenemos ante nosotros sea ocupado, otra vez, por gente que no tiene el mínimo bagaje ni profesional, ni de servicio público.
La especulación del suelo, los privilegios de la banca, las financiaciones irregulares, las bodas faraónicas, los aeropuertos sin aviones, los trenes sin estaciones, los puentes de diseño, los trajes de corte impecable, los coches de lujo, los viajes y fiestas…Todo ha contribuido a que nuestra sociedad se haya ido desangrando poco a poco. Y, para colmo, ahora vamos conociendo que, según parece, unos pocos también se llevan la pasta metida en sobres.
En nuestras manos está poder cambiar las cosas. O aceptamos el reto, o trincamos el sobre con la guita. Vayan eligiendo.

3 comentarios:

  1. podrá decirse en prosa o en verso o como Luis; la verdad solo tiene un camino y cuando la verdad llega la mentira se acaba.
    Los Españoles estamos cansados de esta lacra y los políticos de Vocación También.
    España ni los Españoles están representados por estos oportunistas.

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  2. Compadre de verdad aunque sea por un momento,tu te crees que tanto tus ojos como los mios verán lo de listas abierta.....yo creo que no,pues ya me diras que hacemos con la maná de mangantes que tenemos en la clase política,y hay un porron de los dos bandos o de tantos bandos como hay, en fin me parece una utopía,aunque está bien que la gente piense en ella como un resurgir de lo que llamamos la clase política.-Lo que no debemos caer es que los latinos somo de los que hay que gobernar con palo y tentetieso,aunque de vez en cuando alguno se lo mereciera.-
    .-Un abrazo

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  3. Compadre aunque pierdas un minuto y a lo mejor es un poco demagogo, pero a mi me chifla este tio leelo

    Arturo Perez Reverte
    INDECENTES

    Me gustaría transmitirle al Gobierno pasado, al actual, y al que puede venir lo siguiente:

    TENGAN LA VERGÜENZA de hacer un plan para que la Banca devuelva al erario público los miles de millones de euros que Vds. les han dado para aumentar los beneficios de sus accionistas y directivos


    PONGAN COTO a los desmanes de las empresas de telefonía y de ADSL que ofrecen los servicios más caros de Europa y de peor calidad.

    ELIMINEN la duplicidad de muchas Administraciones Públicas, suprimiendo organismos innecesarios, reasignado a los funcionarios de carrera y acabando con los cargos, asesores de confianza y otros puestos nombrados a dedo que, pese a ser innecesarios en su mayor parte, son los que cobran los sueldazos en las Administraciones Públicas y su teórica función puede ser desempeñada de forma más cualificada por muchos funcionarios públicos titulados y que lamentablemente están infrautilizados.

    HAGAN que los políticos corruptos de sus partidos devuelvan el dinero equivalente a los perjuicios que han causado al erario público con su mala gestión o/y sus fechorías, y endurezcan el Código Penal con procedimientos judiciales más rápidos y con castigos ejemplares para ellos.

    INDECENTE, es que el salario mínimo de un trabajador sea de 624 €/mes y el de un diputado de 3.996, pudiendo llegar, con dietas y otras prebendas, a 6.500 €/mes. Y bastantes más por diferentes motivos que se le pueden agregar.

    INDECENTE, es que un profesor, un maestro, un catedrático de universidad o un cirujano de la sanidad pública, ganen menos que el concejal de festejos de un ayuntamiento de tercera.

    INDECENTE, es que los políticos se suban sus retribuciones en el porcentaje que les apetezca (siempre por unanimidad, por supuesto, y al inicio de la legislatura).

    INDECENTE, es que un ciudadano tenga que cotizar 35/40 años para percibir una jubilación y a los diputados les baste sólo con siete, y que los miembros del gobierno, para cobrar la pensión máxima, sólo necesiten jurar el cargo.

    INDECENTE, es que los diputados sean los únicos trabajadores (¿?) de este país que están exentos de tributar un tercio de su sueldo del IRPF.

    INDECENTE, es colocar en la administración a miles de asesores = (léase amigotes con sueldos que ya desearían los técnicos más cualificados)

    INDECENTE, es el ingente dinero destinado a sostener a los partidos y sindicatos pesebreros, aprobados por los mismos políticos que viven de ellos.

    INDECENTE, es que a un político no se le exija superar una mínima prueba de capacidad para ejercer su cargo (ni cultural ni intelectual).

    INDECENTE, es el coste que representa para los ciudadanos sus comidas, coches oficiales, chóferes, viajes (siempre en gran clase) y tarjetas de crédito por doquier.

    INDECENTE, No es que no se congelen el sueldo sus señorías, sino que NO se lo bajen.

    INDECENTE, es que sus señorías tengan seis meses de vacaciones al año.

    INDECENTE, es que ministros, secretarios de estado y altos cargos de la política, cuando cesan, son los únicos ciudadanos de este país que pueden legalmente percibir dos salarios del ERARIO PÚBLICO.

    Y que sea cuál sea el color del gobierno, toooooooodos los políticos se benefician de este moderno “derecho de pernada” mientras no se cambien las leyes que lo regula.


    ¿Y quiénes las cambiarán? ¿Ellos mismos? Já.

    Juntemos firmas para que haya un proyecto de ley con “cara y ojos” para acabar con estos privilegios, y con otros.


    ¡¡¡ Haz que esto llegue al Congreso a través de tus amigos !!!

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